Pruebas de esfuerzo

Una prueba de aptitud física es básica para practicar deporte de forma segura. El informe de aptitud deportiva certifica si una persona puede practicar una disciplina deportiva concreta sin riesgos para su salud. Se solicita para participar en algunas pruebas deportivas o en el caso de licencias federativas.

¿En qué consiste la prueba?

• Historia clínica del deportista.
• Medición de peso y talla, auscultación cardíaca, electrocardiograma en reposo y toma de presión arterial.
• Espirometría.
• Prueba de esfuerzo: con la que mediremos la respuesta cardíaca al ejercicio y la adaptación del corazón al esfuerzo. El deportista realiza la prueba sobre bicicleta ergométrica o sobre tapiz rodante. Durante el ejercicio, la actividad se monitoriza mediante un registro electrocardiográfico continuo donde se detecta cualquier riesgo cardíaco.

Para deportistas que se preparan para retos más exigentes, realizamos las pruebas de control de entrenamiento con recogida de valores metabólicos (lactato en sangre). Estos parámetros nos darán información más precisa del umbral anaeróbico del paciente además de facilitar diversos datos sobre la recuperación tras el esfuerzo.

También nos ayudarán a perfilar de forma más precisa las cargas e intervalos de entrenamiento a los que está sometido el paciente, y conseguir que su entrenamiento sea el óptimo para alcanzar sus objetivos deportivos.